El Cinturón Pélvico/Pelvis en Pilates
En Pilates hacemos mucho hincapié en la cintura pélvica en relación con el centro abdominal (Power House o Core) donde debemos trabajar la estabilidad . Una de las cosas que Joseph Pilates enfatiza es que si la columna vertebral está desalineada, es por la posición de la pelvis y los músculos que la rodean.
Por eso el trabajo de estabilidad lumbopélvica es una esencia del Método Pilates.
Durante las clases se habla constantemente de la pelvis (su colocación), las crestas ilíacas, el pubis, los isquios... como referencias anatómicas para ayudar al cliente a colocarse correctamente.
¿Qué significa el cinturón pélvico?
Es importante poder visualizar la pelvis de forma clara y sencilla, convencido de que se tiene una percepción más profunda de esta parte del cuerpo, y que es una herramienta maravillosa para entender su movimiento y funcionalidad.
La cintura pélvica forma la base del torso y se divide en dos partes: la pelvis mayor o falsa pelvis, que corresponde a la parte superior más ancha donde se encuentran los órganos abdominales. Y la pelvis menor o pelvis verdadera, que corresponde a la parte inferior más estrecha, donde se encuentran la vejiga, los genitales y el final del intestino.
La función principal de la cintura pélvica es reunir las extremidades inferiores del torso y transferir el peso de la parte superior del cuerpo a estas extremidades. También soporta los órganos viscerales, los tendones musculares y la fascia, que conforman el diafragma pélvico o suelo pélvico, cuyos músculos desempeñan un papel muy importante en la estabilidad de la pelvis.
Una de las funciones de la pelvis que no debe descuidarse es el equilibrio de la columna vertebral para mantener una correcta alineación y estabilización de nuestra segmentación somática central, ya que cualquier disfunción de la pelvis repercutirá inevitablemente en nuestra columna.
Con el Método Pilates, aprendemos a estar constantemente bien alineados (autoexpansión) para poder trabajar todas las posiciones en equilibrio y evitar cualquier lesión.
Toda la estructura del cuerpo depende del esqueleto axial, a través de los potentísimos ligamentos que sirven de refuerzo y aseguran la estabilización de las articulaciones pélvicas.
